Novak Djokovic ha compartido su perspectiva sobre la crianza de sus hijos, enfatizando la importancia de la creatividad y la educación. En una reciente aparición en un programa de televisión serbio, el tenista de 37 años habló sobre cómo sus hijos, Stefan y Tara, aún no tienen teléfonos, a pesar de que se quejan de ser los únicos en su escuela sin uno.
Djokovic se describe como un padre “de la vieja escuela” que valora la educación y el desarrollo integral de sus hijos. Recordó las enseñanzas de su entrenadora de la infancia, Jelena Gencic, sobre la importancia de escuchar música clásica y leer libros. A pesar de los desafíos de la era digital, él y su esposa, Jelena, están decididos a mantener a sus hijos alejados de los dispositivos móviles por ahora.
Además, Djokovic ha optado por que sus hijos asistan a una escuela privada en Belgrado, donde se fomenta la creatividad y la participación activa de los padres en la educación. Aunque ha vivido gran parte de su vida en el extranjero, desea que sus hijos se conecten con sus raíces serbias.
El tenista también ha expresado que, a medida que avanza en su carrera, le resulta cada vez más difícil estar lejos de su familia. Ha reducido su agenda para centrarse en los torneos más importantes, priorizando el tiempo con sus seres queridos.