París, 30 de septiembre de 2024 – El 29 de septiembre, Lacoste marcó un hito tanto en su historia como en la de la moda y el deporte, al organizar por primera vez una cumbre en el impresionante escenario de Juyongguan, en la Gran Muralla de Pekín, China.
Un Homenaje a Novak Djokovic
Lacoste continúa desafiando los límites creando el mayor evento de moda y deporte jamás realizado: un encuentro sin precedentes entre dos íconos mundiales, la Gran Muralla, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y Novak Djokovic, considerado el jugador más exitoso de la historia del tenis. Conocido por su fortaleza mental y técnica excepcional, Djokovic, apodado el GOAT (Greatest Of All Time), honró este evento histórico, encarnando los valores de Lacoste e inspirando a los aficionados a superar cualquier desafío.
“Durante más de 90 años, nos han guiado los valores de innovación, creatividad y superación personal, heredados de René Lacoste. Estamos orgullosos de romper moldes nuevamente con este encuentro extraordinario: la leyenda del tenis Novak Djokovic y la icónica Gran Muralla. Este poderoso símbolo de unidad y grandeza ofrece un escenario único para celebrar la fusión de herencia e innovación, manifestando nuestra visión en Lacoste”, afirmó Thierry Guibert, CEO de Lacoste.
Un Evento que Une Tradición y Modernidad
Esta iniciativa global, lanzada en París en abril de 2024 con la campaña “Play Big”, es una auténtica oda a la audacia y la creatividad. La Gran Muralla, una de las Siete Maravillas del Mundo y la única estructura artificial visible desde el espacio, estableció un nuevo récord al acoger este evento, encarnando plenamente el espíritu de “Play Big”. Iluminada con los colores icónicos de Lacoste, el evento incluyó la inauguración de una majestuosa pista de tenis.
El embajador de Lacoste, Wang Yibo, uno de los artistas jóvenes más influyentes de Asia, también estuvo presente para dar la bienvenida a Djokovic, creando un encuentro legendario. Wang Yibo, un artista polifacético guiado por su filosofía de libertad a través del movimiento, comparte con Djokovic y Lacoste su amor por el deporte. Junto a otros artistas locales, ofrecieron una experiencia inmersiva que combinó cultura, estética y entretenimiento.
Este evento no solo celebra la grandeza de Djokovic, sino que también resalta la visión de Lacoste de unir la tradición con la modernidad, dejando una huella imborrable en la historia del deporte y la moda.